Los carteles en algunos restaurantes KFC en Singapur informan a los clientes que la compañía reemplazará las coberturas de papa frita con waffles de papa debido a «interrupciones en las entregas globales». Por la misma razón, los restaurantes McDonald’s en Malasia e Indonesia han dejado de vender grandes porciones de papas fritas desde el mes pasado.
«Las interrupciones de la pandemia continúan teniendo un efecto en las cadenas de suministro y las redes de distribución globales», dijo Diana Hoo, directora de marketing de KFC Singapur.
Las cadenas de suministro globales se han visto presionadas por la variante omicron en los últimos meses como resultado del aumento de los controles aduaneros portuarios y la crisis laboral en el sector del transporte. McDonald’s se vio obligado a racionalizar las papas fritas en los restaurantes japoneses a fines del año pasado después de que las inundaciones en el puerto canadiense de Vancouver y el coronavirus bloquearon las entregas.
Las papas paja que usan los restaurantes KFC en Singapur se importan de EE. UU. y Europa, dijo Diana Hoo. La falta de mano de obra y la baja producción de papas en el noroeste de Estados Unidos, donde se cultivan las famosas papas de Idaho, se han visto exacerbadas por la congestión en los puertos de Estados Unidos y Canadá en la costa del Pacífico, agregó Diana Hoo.
A esto se suma el hecho de que los buques portacontenedores que ingresan a los puertos de Singapur están experimentando demoras más largas de lo habitual. En promedio, se esperaba que 17 buques portacontenedores atracaran en el segundo puerto más activo del mundo en enero de este año, frente a los 15 buques diarios de diciembre, según la consultora project44.
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